¿Legalizar la marihuana?
Para varios países el tema de la legalización de drogas, específicamente el de la marihuana ha representado mucha controversia y retos, debido a que aún sigue siendo considerado un asunto “tabú” por la constante propaganda de los medios masivos de comunicación, los diversos conflictos en los que se ha visto involucrado este estupefaciente y por un código moral que impide su análisis objetivo.
En México poner en la mesa de discusión este tema no ha sido muy distinto; para la mayoría de las sociedad mexicana el tema de la legalización de la marihuana es algo impensable ni siquiera pronunciable; nuestra sociedad tiene la percepción de que al legalizar la marihuana, se abrirán nuevos caminos hacia otro tipo de drogas como la cocaína, heroína, anfetaminas entre otros; o que se volverían más adictos la personas que ya la consumen y también afectar a sectores vulnerables de la población. Pero la realidad para nuestro país es una muy distinta; según los informes del consumo de drogas en México, diagnostico, tendencias y acciones(http://www.salud.gob.mx/unidades/cdi/documentos/CDM.htm) y junto con la tabla elaborada por el partido PSD para su propuesta de legalización de marihuana,(http://psd.org.mx/regulemos_las_drogas.html?gclid=CIrP2s26gpkCFQEuxwodtzcUlg) el estupefaciente con más consumo a nivel nacional es la marihuana con un 4.4% seguido por un 4.2% a nivel estudiantil. Esto se debe a dos principales factores. El primero es que la marihuana es fácilmente cultivable, y adaptable a la mayoría de los climas. Y el segundo es el precio y la accesibilidad que se tiene a esta es mayor y mucho más económica que obtener una dosis de Heroína o unos gramos de cocaína.
El poder que adquiere el narcotráfico en México crece día con día la vulnerabilidad que presenta las diversas instituciones del estado es alarmante, su dominio sobre la población es inminente, además de las ganancias económicas que van obteniendo estos grupos organizados hablan de un dominio regional, que puede caer en el control total del estado tanto legal como ilegalmente ¿Cuántas figuras políticas no están coludidas con el narcotráfico? ¿Cuántas de nuestras “sagradas instituciones” no lo están? El gobierno es conciente de este problema como una amenaza a la seguridad nacional, pero es más fácil considerarlo como un enfrentamiento frontal contra el narcotráfico como Calderón lo hizo desde el primer día de su gestión; conflicto que al día de hoy se ha vuelto en incontenible. Los diversos actos que comenten estos grupos son más constantes, la cantidad de soldados y población civil que se afectada por este confrontamiento va en aumento. Por lo que yo preguntaría si la marihuana es uno de los principales estupefacientes por los que se ve beneficiado el narcotráfico ¿Por qué no mediar con este problema como se hizo en años atrás con el alcohol? En estados Unidos se libro una cacería de los distribuidores de alcohol que atrajo más problemas de los que resolvió, por lo que la solución fue legalizar el alcohol, regulándolo con varias medidas preventivas. Yo se que muchas de las medidas preventivas no fueron las mejores, y que la mayoría de los accidentes gracias al alcohol son irreversibles y son muchos. Pero es mejor lidiar con unos problemas con políticas públicas, que lidiar al interior con grupos organizados que pongan en riesgo la seguridad y continuidad de estado.
Al legalizar la marihuana, se pretende debilitar potencialmente la infraestructura de estos grupos es decir, menos obtención de armas, menos dinero con el cual financian su movilización, producción y distribución; por lo que la consecuencia lógica sería frenar su influencia directa sobre la población y a servidores públicos. Con esta iniciativa el objetivo primordial es buscar una nueva reformulación a la lucha o política contra el terrorismo, “reducir” considerablemente los enfrentamientos violentos o la violencia generalizada. Es por ello que la legalización de la marihuana puede convertirse en una nueva estrategia y visión que ayude a contener el narcotráfico en México. Solo se tendría que regular correctamente y tener recursos como campañas de salud para no caer en el otro extremo y generar un daño colateral a la sociedad.